Es cierto que muchas personas sueñan con tener una piel perfecta: una piel bonita, saludable, lisa, suave e hidratada.
Pero lo que suele pasar es que la gente quiere ir por un lado o por el otro, sin tener en cuenta que una piel sana es el resultado de un conjunto de factores.
En otras palabras, no sirve de nada hacer el skincare todos los días si no bebes una cantidad adecuada de agua, por ejemplo.
Por ello, hemos traído en este artículo un conjunto de factores que influyen en la belleza y salud de la piel. Lo ideal es complementar estos cuidados para que te acerques lo máximo posible a la piel que siempre quisiste tener.
1 – El primer paso para una piel perfecta es hidratarla de adentro hacia afuera
Sí, lo básico que ves en todas partes: beber agua. Somos 90% agua, por eso es tan esencial para nuestra salud, y nuestra piel es una de las primeras en mostrar signos de deshidratación.
Lo recomendable es ir siempre acompañado de tu botella y beber agua incluso antes de sentir sed. Necesitas crear este hábito.
La cantidad media de agua necesaria varía de 2 a 3 litros por día. Cuando aumentes tu consumo de agua, pronto notarás una piel más hidratada, con más elasticidad y vitalidad.
2 – Limpia tu piel a diario y de la forma adecuada
La limpieza de la piel es un paso importante para evitar la acumulación de impurezas en el día a día.
Pero no es suficiente simplemente limpiarlo de todos modos. Utiliza jabones o lociones limpiadoras específicas para el rostro, ya que los jabones corporales comunes pueden acabar resecando demasiado la piel del rostro que es más sensible.
También es bueno optar por jabones faciales para todo tipo de piel o para tu tipo específico. Por ejemplo, no es recomendable utilizar jabón para pieles grasas si tu piel es seca.
Y es necesario prestar aún más atención a la limpieza facial cuando se está maquillada, ya que es fundamental desmaquillarse por completo antes de acostarse.
3 – Protege tu piel del sol
El uso de protector solar es fundamental si quieres tener una piel bonita y sana, ya que bloquea la acción de los rayos UVA y UVB sobre la piel.
Esta protección es fundamental para prevenir quemaduras, envejecimiento prematuro e incluso cáncer de piel. También es excelente para combatir las manchas, la flacidez y las arrugas.
Además, es bueno aportar un protector solar específico para el cuerpo y otro para el rostro, ya que la piel del rostro es mucho más delicada. Lo ideal es utilizar un protector oilfree para el rostro, e incluso específico para pieles sensibles si procede.
4 – Come alimentos que nutran tu piel
¿Has intentado cambiar tu dieta durante una semana? Los efectos en la piel son visibles. La alimentación influye mucho en la salud del aspecto de tu piel.
Los alimentos ricos en vitaminas, minerales y antioxidantes son buenos para tu piel, dándole más vitalidad.
Pero, ¿qué comer para tener una piel sana? Un buen consejo es apostar por los frutos rojos y cítricos, ya que son ricos en vitamina C, elemento que previene el envejecimiento prematuro. Las verduras también son grandes aliadas para una piel sana.
5 – Ten una rutina de skincare y usa buenos productos
La piel necesita cuidados de rutina para mantenerse sana e hidratada.
Además de la limpieza diaria, también es habitual el uso de sérums hidratantes y nutritivos, aunque no es una norma. Cada piel requiere un cuidado diferente, por lo que debes entender qué productos funcionan bien en tu piel y cuáles no.
Además, invierte en productos de calidad que tengan ingredientes realmente saludables para tu piel y que sean recomendados por tu dermatólogo.
6 – Potencia tu cuidado con tratamientos de rejuvenecimiento facial
No hay nada más eficaz para el cuidado de la piel que los tratamientos estéticos especializados. Esto se debe a que mejoran enormemente su cuidado de rutina.
Los tratamientos estéticos son capaces de suavizar las arrugas, aclarar las manchas de la piel, eliminar las impurezas e hidratar en profundidad, como es el caso de HydraFacial.
Otros tratamientos, como los bioestimuladores de colágeno, pueden estimular al cuerpo a producir más colágeno, lo que hace que la piel esté más firme.
Otro ejemplo de tratamiento para la piel es el PRP, plasma rico en plaquetas, que utiliza el plasma sanguíneo del propio paciente para dar brillo, fuerza y vitalidad a la piel.
En Harmony & Health, su búsqueda de una piel perfecta ha terminado, ya que ha encontrado los tratamientos ideales para una piel hermosa y saludable.
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